Sólo sé que sigo sin saber nada

martes, junio 23, 2009

It works

1) Disipador térmico de cuadruple hélice de alta velocidad.

2) Contenedor acotado de hidrógeno y oxígeno en estado sólido.

3) Depósito-conductor-dispensador de refrigerante en estado líquido.

4) Contenedor-acumulador-reciclador

5) Botella para beber que antes está "del tiempo" y ahora más fresca que a temperatura ambiente pero no tan desagradablemente fria como resultan las puestas a enfriar en el frigorífico.

Juro que funciona

jueves, junio 18, 2009

Cosas que no sabia que no me gustaban

Me falta tiempo, estoy terriblemente ocupado y, como demostración de ello, he elaborado la siguiente lista.

COSAS QUE NO SÉ QUE NO ME GUSTAN

Es decir, cosas que me apetecen hasta que las hago y entonces digo... si es que esto no me gusta. Lo curioso es que, un tiempo después, vuelvo a caer.

· El palulú. Morder un palo siempre es algo que mola, pero al rato (10 segundos) el sabor empalagoso, el palo hecho trizas en tu mano, la sensación de oso panda... no compensa. En mi descargo diré que hace ya bastantes años que me quité del Palulú, aunque ahora mismo... mordería uno un rato.

· La sobrasada. ¡Mmmm! Qué rica está la sobrasada. Me encanta. Pero no hay un sabor –salvo quizá el del palulú- que me canse más rápido. ¿Quién puede comer un bocadillo entero de sobrasada? Estáis locos.

· Los rollitos de primavera. Odio la verdura y, sin embargo, durante años me he pedido rollitos que nunca he acabado, ni de lejos. Por fin he roto el estigma, claro que... ¿existe algún entrante en los restaurantes chinos a parte del rollito o el pan de gambas?

· El algodón de azucar. Misma canción que con el palulú o la sobrasada. ¡Cómprame uno, cómprame uno! Dos pinzadas a esa sobredosis de glucosa y ¡qué asco! Se queda la boca como barnizada. Pero es que, claro, con esa pinta de nube... ¡a ver quien es el guapo que no vuelve a caer!

· El gimnasio. Debe haber alguna alineación estelar que me hace olvidar que detesto los gimnasios. La única experiencia positiva que he tenido fueron mis clases de Kung-Fu (Sí, amigos, sé Kung-Fu) pero lo de ir a hacer pesas... ¿Existe algo más aburrido sobre la faz de la tierra? Tener un cuerpo cachas no es complicado por el esfuerzo físico en si, es complicado porque no existe nada más coñazo. Recordádmelo la próxima vez que diga de apuntarme a uno.

· Las peceras. Tener pecera... debería molar. Pero en realidad es un coñazo. Mi hermana Cristina era perseverante en ese tema y yo siempre me alegraba ¡Guay, una pecera! La emoción duraba lo que tardabas en darte cuenta de que los peces son animales, en contra de la creencia popular, muy poco cariñosos. Además, no sé si es algo generalizado o sólo ocurría en mi casa, pero todos los intentos de tener pecera acababan en terribles y masivas enfermedades que poco menos que provocaban que los peces se pudrieran en vida. Qué horror. Te juras que nunca volverás a tener pecera, pero muchas veces es mentira.

· Las camisetas con pegatina. Las camisetas, principalmente negras, no pueden llevar impresos colores muy vivos, ya que no hay tinte tan fuerte como para contrarrestar el tinte negro del algodón, de modo que si tienen algo impreso lo tienen impreso con una “pegatinas” adheridas a la tela. En ocasiones me compro alguna porque el dibujo me gusta, digo... no dan tanto calor! La uso en entretiempo! ES IGUAL. Aun en invierno un plástico pegado al cuerpo te va a hacer sudar como un animal. Pienso en usarlas como pijama y... lo mismo. No a las camisetas negras con pegatinas. ¿Es que nadie va a hacer nada al respecto?

· Los pijamas. Otra de la infancia. De pequeño, cada cierto tiempo, me daban ganas de dormir con pijama. Ignoro qué es lo que a mi se me escapa, pero creo que dormir con pantalones es contra-natura. Y tremendamente incómodo.

· Vacaciones Santillana. Definitivamente de pequeño era imbécil. O al menos más imbécil que ahora. Acababa el colegio y veía aquellos anuncios tan chulos de “Vacaciones Santillanaaaa” y poco menos que le rogaba a mi madre que me los comprase. No había pasado cinco minutos (ni cinco segundos tampoco) delante del maldito cuaderno-estropea-veranos cuando ya quería prenderle fuego. Tener morriña de los compañeros de clase y del recreo es lícito. De los deberes es de idiota. Y yo era idiota un verano, y otro, y otro... Por supuesto no completé ni un solo cuaderno, ya tenía bastante con los ejercicios de recuperación de las que me habían quedado, pero ¿y el cargo de conciencia por el trabajo autoimpuesto e incumplido? A veces creo que esa sensación nació con esos cuadernos y ya nunca me dejará.

Quizá por eso hago listas como esta en vez de estar escribiendo lo que tengo que escribir.

lunes, junio 08, 2009

El mejor regalo del mundo

Ahí va Bea.
¿Quien dijo miedo?







Ahí voy yo...









Sí, soy un privilegiado.

miércoles, junio 03, 2009

Publicidad subliminal

A ver...

Yo cuando estudié realización también estudié algo de publicidad. Allí nos hablaron de algunos de los "trucos" que se pueden usar para captar la atención de los posibles compradores. Entre las cosas a tener en cuenta está, claro, la atracción sexual. La atracción sexual y el deseo de "proyectarnos" en los protagonistas de los anuncios son los culpables de que el 99% de los que salen en la tele para vender algo sean modelos. El sexo vende, eso lo sabe todo el mundo. Y los publicistas se buscan las vueltas para que, de manera más o menos rebuscada, se pueda asociar su producto con un cierto deseo sexual.

Pero hay otros publicistas que dicen "¡¿Para qué me voy a andar por las ramas?!! Pon una tía buena y punto!!"

Quizá por eso hace un momento estaba leyendo la edición digital de EL PAÍS, cuando me ha llamado la atención una de los habituales anuncios que aparecen junto con los artículos. Ejemplo máximo de la sutileza y buen hacer.

El anuncio en cuestión es este:



¿Eh? ¿Y esta chica? ¿Qué venden? ¡Wualaaaa! Se acabaron los discursos y las justificaciones, se acabaron las patrañas ¿Para qué quieres ganar la lotería? ¿Para decir adiós a tu trabajo? No; ¿Para irte a recorrer el mundo? No; ¿Para encontrar el amor? No; PARA FOLLAR!! Asi de claro.

Y lo triste es que el anuncio funciona, a fin de cuentas me ha llamado la atención y aquí estoy hablando de ello.

Aunque yo creo que, ya puestos, deberían ser aún más claros y hacer algo por el estilo a esto.


Yo no sé vosotros, pero me voy a jugar al Euromillon!!